Este documental pretende mostrar los procesos y las consecuencias que
resultan de la mercantilización de la Universidad y de su contexto
político, económico y social.
Para ello, contactamos y entrevistamos a personas vinculadas a la
universidad de diferentes maneras y con distintos perfiles, desde una
ex-alumna hasta un ex-rector; con tal de intentar ofrecer una visión
amplia y diversa de lo que acontece la educación superior. Nuestro
cedazo, en materia de selección de los entrevistados, fueron los ejes
temáticos que veíamos importante tratar así como la voluntad de
colaboración con este proyecto; pues, cabe decir, que no pocos
desatendieron nuestra invitación.
Con todo, parece ser, que de una manera u otra la mayoría de los puntos
de vista mostrados en el documental convergen hacia un mismo punto: la
Universidad, la niña bonita de nuestras instituciones, se ha dejado
corromper. Y lo ha hecho de distintas maneras: sometiéndose a los
dictados de la mercantilización, dejándose llevar por la fiebre
inmobiliaria, banalizando los títulos, aceptando la privatización
-literalmente- de los resultados de las investigaciones (y por ende;
elitizando y privatizando el conocimiento producido con dinero público),
deshumanizando las aulas y a lo que ellas contengan, etc. Todo, por tal
de satisfacer a nuestras nuevas deidades: los mercados, las empresas y
las corporaciones que en ellos actúan.
Así, el documental transita desde los espacios macroeconómicos de
decisión que marcan la pauta y el hacer de los gobiernos a la traducción
directa de la aplicación de estas medidas, previo señalamiento de los
responsables políticos, explicitando las consecuencias sociales y
personales que tienen estas dinámicas.